El Sindicato Unificado de Policía (SUP) de Ourense ha solicitado este jueves personarse como acusación en la causa que instruye el juzgado de Instrucción de la "Operación Zamburiña", que se saldó en noviembre de 2015 con dos agentes detenidos en el marco de una operación contra el tráfico de drogas, y ha defendido la inocencia de ambos agentes investigados.
En un comunicado, el sindicato policial ha defendido la presunción de inocencia de los policías investigados y ha cuestionado "la desproporción" de las actuaciones llevadas a cabo por la unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional. La investigación se inició en 2015, a raíz de unos anónimos y se saldó con trece personas arrestadas por esta causa a raíz de la investigación llevada a cabo por Asuntos Internos de la Policía Nacional, con varias personas implicadas. Tras meses de investigación, la investigación concluyó el diez de noviembre con dos policías detenidos por delitos relacionados con la revelación de secretos u omisión de perseguir delitos, derivado de su trato con confidentes.
Cuando se cumplen casi dos años de las detenciones, el SUP ha denunciado las "posibles irregularidades" cometidas por parte de la unidad de Asuntos Internos acusándole de "falta de rigor" con los anónimos. Además, ha aludido a errores en la auditoría realizada por Asuntos Internos en relación con las supuestas consultas de datos restringidos de unos de los encausados y "la aportación fragmentada y sesgada de las intervenciones telefónicas" al juzgado.
Desde el SUP afirman que el juzgado "no tiene en su poder todos los elementos necesarios para conceder la autorización de las intervenciones telefónicas efectuadas a los policías, vulnerando así un derecho fundamental de los mismos", recoge este sindicato, quien ha criticado las "infructuosas gestiones" tendentes a la averiguación del posible autor o autores del anónimo que da origen al inicio de las actuaciones.
Finalmente, el sindicato ha censurado las informaciones "falsas e intencionadas", motivo por el cual ha presentado una querella contra el presunto autor o autores del anónimo, interesando que se averigüe su identidad. En la querella, a la que ha tenido acceso Efe, el SUP aprecia un "ánimo de venganza" para intentar "menoscabar la integridad moral profesional y personal de los agentes" con coacciones y amenazas por algún tipo de venganza" por lo que piden una investigación a fin de esclarecer su identidad.
